Pedro Sánchez, presidente de España, gracias a la traición de Mariano Rajoy Brey y gracias al contubernio de todos los enemigos de la Nación, ha iniciado su gobierno, adoptando una serie de medidas que provocarán la desgracia de todos los ciudadanos y habitantes de esta Nación que aún conocemos como España:
A partir de estas simples notas, concluiremos que a España le espera un sombrío futuro, pues el gobierno de la Nación ha sido cooptado por un partido que no es socialista, ni obrero, ni español, y que ha sido apoyado por todos aquellos que desean destruir el régimen jurídico constitucional español, sea por aspiraciones “republicanas”, sea porque desean destruir la unidad política y territorial de la Nación, sea porque quieren imponer proyectos totalitarios racistas bajo un sistema de apartheid o porque, simplemente, desean emplear los recursos del Estado en su propio beneficio para generar clientelas políticas de pobres y necesitados que dependan de sus dádivas.
Ese régimen no es nuevo. Argentina es muestra de ello.
Históricamente es lo que ha hecho el “peronismo” en ese país, y lo que han ejecutado dictadores varios como Fidel y Raúl Castro, Chávez y Maduro, o personajes tan oscuros como muchos de aquellos que dirigieron los destinos de los países integrantes de la “cortina de hierro”.
Para finalizar, volvamos al “Aquarius”, hecho trágico de nuestros días que refleja la demagogia, el maniqueísmo político y la mezquindad y ruindad política de Sánchez y de muchos de sus aliados.
Porque cuando la caridad, la solidaridad, o el amor hacia los semejantes se basan en una decisión individual, o familiar, de aquellos que desean libremente compartir su riqueza con los menos favorecidos, o que viven situaciones de pobreza moral, angustia o necesidad por motivos diversos, ello es encomiable y elogiable.
Pero, cuando esa caridad, esa solidaridad o ese amor hacia otros, se ejecuta gracias al uso de recursos públicos que, lógicamente, son escasos y limitados, ello, lejos de ser admirable, constituye un expolio, un robo y un latrocinio al patrimonio de todos, además de constituir un insulto al sacrificio de millones de ciudadanos que, durante años, han contribuido con su trabajo, con su sacrificio y con sus impuestos al erario público, y que, en cientos de miles de casos, se ven privados de ayudas económicas en tiempos de escasez, que no pueden acceder a ningún tipo de ayuda social, o que jamás cobrarán una renta de inserción como los ilegales.
Acoger a ilegales constituye un cretinismo político pues implica hacer “solidaridad” con el dinero de otros.
Acoger a ilegales constituye una infamia jurídica al abrir las “fronteras de España y de Europa” a quienes llegan incumpliendo la ley.
Por tanto la única solución posible es CERRAR LAS FRONTERAS, terminando con la demagogia de políticos irresponsables, con la hipocresía de ONGs de dudosa transparencia y con el discurso perverso de quienes, amparados por la ideología de género, pretenden destruir las raíces culturales de Occidente, para islamizar a Europa y convertir, a sus ciudadanos, en ovejas sometidas a un proyecto social totalitario.
George Soros, su nefasta fundación, y todas las ONGs subvencionadas que predican el odio hacia Occidente, han hallado en el inútil Sánchez a un esclavo de sus intereses pues, no nos engañemos, Sánchez es el Presidente de todos los que desean destruir a España; de todos aquellos que siembran el odio, el resentimiento y el guerracivilismo, en un contubernio de bildu-etarras, cata-nazis, comunistas bolivarianos, socialistas antiespañoles y nazi-onalistas varios.
Si el Presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, o la Vicepresidenta Oltra, o el Arzobispo de Zaragoza, o el Presidente Sánchez, o Pablo Iglesias, o el Padre Ángel, entre otros, desean ser solidarios, caritativos o generosos con su patrimonio y recursos ganados con su trabajo, son libres de hacerlo.
Pero, seguramente, no veremos a Ximo Puig o a Mónica Oltra albergar a inmigrantes ilegales en sus domicilios, alimentándoles y atendiendo a sus necesidades; tampoco veremos al Arzobispo de Zaragoza o a otros prelados de dudosa transparencia abrir las sedes, palacios o residencias religiosas a los ilegales, ni observaremos al demagogo Pablo Iglesias compartir las estancias de su casoplón de Galapagar con los “parias de la tierra”, o a ONGs millonarias socializar sus riquezas con los necesitados. Pues, para eso, disponen de los recursos de un Estado al que exprimen como naranjas, prendiéndose como garrapatas al ganado enfermo, para alimentarse de su sangre y de sus fluidos, hasta que el animal muera.
Lo triste es que, siguiendo con las comparaciones, para algunos, el animal a exprimir se llama España y las garrapatas son todas esas castas privilegiadas que no dudarán en destruirla, con tal de mantener sus privilegios y prebendas.
Frente a ese panorama y a esta realidad, sólo cabe una reacción de la sociedad civil que diga basta, y que sepa diferenciar entre los “espejos de colores” del sanchismo y sus aliados, y la cruda realidad del peligro que vivimos, y que podrá aniquilarnos como sociedad, como cultura y como Nación.
- Rendición política y concesiones cómplices con el golpismo catalán, a tenor de las declaraciones públicas de la Ministra Meritxell Batet y de los gestos, y palabras, del Presidente Sánchez, dotando con millones de euros las arcas del separatismo catalán, realizando concesiones a los golpistas, como abstenerse de adoptar cualquier medida contra la reapertura de las costosísimas “embajadas” de Cataluña en el exterior, para avivar el odio hacia España, y haciendo guiños a los procesados y fugados de la justicia; unido todo ello al reconocimiento del “Estatuto de Cataluña”, muchos de cuyos artículos habían sido declarados “inconstitucionales” por el Supremo.
Sánchez en el Senado
- Concesión de casi 9.000.000 de euros de subvenciones a los sindicatos que, en lugar de mantenerse con dinero proveniente de sus afiliados, viven del presupuesto público a costa de los sufridos contribuyentes españoles y que, a resultas de este "gesto, han "paralizado las movilizaciones que tenían previsto realizar"
Sánchez en su reunión con sindicalistas
- Rendición política y concesiones en favor del entorno pro ETA, en pos de “acercar presos” a las Vascongadas, transferir las competencias penitenciarias a dicha comunidad autónoma, y entregando la educación y otras áreas de gobierno de Navarra a los dictados de los políticos abertxales.
- Complicidad con las mafias que se enriquecen con la inmigración ilegal, al posibilitar el ingreso de cientos de inmigrantes “I L E G A L E S” en territorio nacional, haciéndoles concesiones inadmisibles, a saber:
- A cada uno de los 629 inmigrantes ilegales del Aquarius se les otorgará una renta de inserción social mínima de 495€ mensuales. Para acceder a la misma se requiere llevar 12 meses empadronado en un municipio de la comunidad valenciana. Se calcula que, para fines del 2020, beneficiará a 100.000 personas.
- Esa prestación es indefinida y no requiere ningún tipo de compromiso, por parte del beneficiario, de realizar acciones formativas ni de desempeñar trabajo alguno.
Foto: https://elpais.com/ccaa/2018/06/19/valencia/1529424790_762723.html
- Los ilegales del Aquarius dispondrán de la tarjeta de sanidad universal¸ pese a haber sido declarada inconstitucional por el Tribunal Constitucional.
- Esos beneficios alcanzarán, incluso, a los presuntos inmigrantes ilegales V I O L A D O R E S que han llegado en el Aquarius, a tenor de las declaraciones de la vice presidenta de la Comunidad Valenciana, Mónica Oltra, quien declaró a los medios de comunicación que darían asistencia sanitaria y psicológica a las mujeres que habían sido violadas durante su travesía en el barco.
- Desde el año 2009, el número de inmigrantes ilegales no ha dejado de crecer. Así, el año pasado, el número de ilegales superó en más de un 200% las cifras del año 2003. Y, en lo que va del año 2018, ya han ingresado más ilegales en España que durante todo el año 2017.
- La llegada de “ilegales” no conforma otra cosa que un “negocio más que lucrativo” para las mafias que trafican con seres humanos, para ONGs de dudosa transparencia que se benefician de millonarias subvenciones del Estado, y para una casta política sectaria, totalitaria e hipócrita, a la que le resulta muy fácil hacer solidaridad con el dinero de otros, mientras perciben millonarios ingresos que garantizan sus privilegios de clase.
- Paralelamente el Ministro Grande Marlaska ha anunciado su intención de retirar las “concertinas” como medida “pasiva” de contención a las irrupciones de ilegales en nuestras fronteras, lo cual ha sido denunciado por las asociaciones de Guardias Civiles que custodian nuestras fronteras. Marlaska quizás no quiera recordar que dichas concertinas fueron instaladas, en el año 2005, Ceuta y Melilla, bajo el mandato del Presidente Rodríguez Zapatero y con la firma del entonces ministro Antonio Camacho.
- Canarias está siendo asaltada por una “avalancha de pateras”, Andalucía tiene sus centros de acogida totalmente saturados y Baleares se encuentra amenazada por una auténtica invasión de ilegales, como primer paso hacia el continente europeo desde las costas de Libia, un estado fallido, gracias a las políticas erróneas de Barack Obama y de Naciones Unidas.
A partir de estas simples notas, concluiremos que a España le espera un sombrío futuro, pues el gobierno de la Nación ha sido cooptado por un partido que no es socialista, ni obrero, ni español, y que ha sido apoyado por todos aquellos que desean destruir el régimen jurídico constitucional español, sea por aspiraciones “republicanas”, sea porque desean destruir la unidad política y territorial de la Nación, sea porque quieren imponer proyectos totalitarios racistas bajo un sistema de apartheid o porque, simplemente, desean emplear los recursos del Estado en su propio beneficio para generar clientelas políticas de pobres y necesitados que dependan de sus dádivas.
Ese régimen no es nuevo. Argentina es muestra de ello.
Históricamente es lo que ha hecho el “peronismo” en ese país, y lo que han ejecutado dictadores varios como Fidel y Raúl Castro, Chávez y Maduro, o personajes tan oscuros como muchos de aquellos que dirigieron los destinos de los países integrantes de la “cortina de hierro”.
Para finalizar, volvamos al “Aquarius”, hecho trágico de nuestros días que refleja la demagogia, el maniqueísmo político y la mezquindad y ruindad política de Sánchez y de muchos de sus aliados.
Porque cuando la caridad, la solidaridad, o el amor hacia los semejantes se basan en una decisión individual, o familiar, de aquellos que desean libremente compartir su riqueza con los menos favorecidos, o que viven situaciones de pobreza moral, angustia o necesidad por motivos diversos, ello es encomiable y elogiable.
Pero, cuando esa caridad, esa solidaridad o ese amor hacia otros, se ejecuta gracias al uso de recursos públicos que, lógicamente, son escasos y limitados, ello, lejos de ser admirable, constituye un expolio, un robo y un latrocinio al patrimonio de todos, además de constituir un insulto al sacrificio de millones de ciudadanos que, durante años, han contribuido con su trabajo, con su sacrificio y con sus impuestos al erario público, y que, en cientos de miles de casos, se ven privados de ayudas económicas en tiempos de escasez, que no pueden acceder a ningún tipo de ayuda social, o que jamás cobrarán una renta de inserción como los ilegales.
Acoger a ilegales constituye un cretinismo político pues implica hacer “solidaridad” con el dinero de otros.
Acoger a ilegales constituye una infamia jurídica al abrir las “fronteras de España y de Europa” a quienes llegan incumpliendo la ley.
Por tanto la única solución posible es CERRAR LAS FRONTERAS, terminando con la demagogia de políticos irresponsables, con la hipocresía de ONGs de dudosa transparencia y con el discurso perverso de quienes, amparados por la ideología de género, pretenden destruir las raíces culturales de Occidente, para islamizar a Europa y convertir, a sus ciudadanos, en ovejas sometidas a un proyecto social totalitario.
George Soros, su nefasta fundación, y todas las ONGs subvencionadas que predican el odio hacia Occidente, han hallado en el inútil Sánchez a un esclavo de sus intereses pues, no nos engañemos, Sánchez es el Presidente de todos los que desean destruir a España; de todos aquellos que siembran el odio, el resentimiento y el guerracivilismo, en un contubernio de bildu-etarras, cata-nazis, comunistas bolivarianos, socialistas antiespañoles y nazi-onalistas varios.
Si el Presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, o la Vicepresidenta Oltra, o el Arzobispo de Zaragoza, o el Presidente Sánchez, o Pablo Iglesias, o el Padre Ángel, entre otros, desean ser solidarios, caritativos o generosos con su patrimonio y recursos ganados con su trabajo, son libres de hacerlo.
Pero, seguramente, no veremos a Ximo Puig o a Mónica Oltra albergar a inmigrantes ilegales en sus domicilios, alimentándoles y atendiendo a sus necesidades; tampoco veremos al Arzobispo de Zaragoza o a otros prelados de dudosa transparencia abrir las sedes, palacios o residencias religiosas a los ilegales, ni observaremos al demagogo Pablo Iglesias compartir las estancias de su casoplón de Galapagar con los “parias de la tierra”, o a ONGs millonarias socializar sus riquezas con los necesitados. Pues, para eso, disponen de los recursos de un Estado al que exprimen como naranjas, prendiéndose como garrapatas al ganado enfermo, para alimentarse de su sangre y de sus fluidos, hasta que el animal muera.
Lo triste es que, siguiendo con las comparaciones, para algunos, el animal a exprimir se llama España y las garrapatas son todas esas castas privilegiadas que no dudarán en destruirla, con tal de mantener sus privilegios y prebendas.
Frente a ese panorama y a esta realidad, sólo cabe una reacción de la sociedad civil que diga basta, y que sepa diferenciar entre los “espejos de colores” del sanchismo y sus aliados, y la cruda realidad del peligro que vivimos, y que podrá aniquilarnos como sociedad, como cultura y como Nación.
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